viernes, 5 de octubre de 2018

La muerte en pos delas nuevas relaciones



No puedo ser más decorosa, amorosa y rococó aunque estemos en Libra, porque esta Luna Nueva viene en cuadratura a Plutón arrancando directo, en trígono a Marte en Acuario y nosotros acá, bancando la parada. Ya lo hemos entendido, aprendido, venimos en el tiburón colectivo por momentos, cambiando a dragón, que de a ratos es una hermosa ballena y de a otros un cohete al borde de la explosión. Al avión, submarino, subte, cochebomba, tren de carga, más o menos conocemos la situación. Somos ritmo, somos movimiento, somos transformación. Entonces, es como sigue la siembra de la armonía en la relación.

El amor no existe sin el dolor, la vida es puro ejercicio de evolución. Pero si cada vez que la muerte aceche tenemos que hacer un escándalo, un drama, una resistencia hasta casi la autodestrucción, no quedará mucho resto para los años venideros de profundo trabajo de expansión. Destruir y destruirnos en pos de la creencia de que evitamos el dolor es algo sin sentido y de ignorantes, diría Buda, el gran campeón. Usemos la sabiduría de los maestros y dejémonos de lidiar con bajos instintos que de obvios marchitan al corazón.

Libra, equilibrio, armonía, complementación. Pero también exceso de otro, culpa al resto siempre son todos menos yo los locos, los agresivos, los oscuros los retorcidos. Sol y Luna, Ego y Alma, mente y sentimiento juegan el partido de sembrar una nueva estructura en la relación. Digo estructura y me voy a Capricornio, donde está el amigo Darth Vader, Golum, y cualquier otro villano de colección. Está directo y solo quiere el renacimiento de la responsabilidad de hacerte cargo de quién sos cuando estas en relación. Ya sabés qué columnas estructurales tenés que demoler, o al menos eso debería haberte quedado bastante claro con Plutón en retrogradación. Si te quedan dudas, Venus retrogradando en Escorpio te da un changüí para la demolición. Venus, el deseo, otra vez la armonía y la complementación, se pregunta hasta diciembre, ¿Qué hay reprimido en el fondo del sótano? ¿Qué intento tirar sin mirar por el balcón? Venus, repensar el deseo, las relaciones, cuánto me hago cargo de mi lado oscuro, cuánto reprimo mis deseos porque no están dentro de lo que llamamos “aprobación” El combo sigue, sigue y sigue porque estamos preparados para el funeral y el año nuevo, todo en un mismo colchón. Marte está en trígono a todo esto, diciendo pongo primera en cuanto activen el motor, eso sí siempre y cuando actuemos diferente a la vez anterior. No me pasé casi seis meses en el signo de la revolución para que ahora, cuando estoy en trígono al Soy la Luna en Libra me pidan que sea el mismo de siempre en una relación. Y eso que el deseo y la acción están en tensión. Y cómo se pone todo, es que el Universo esta convencido de que podemos evolucionar un paso más en cuánto a amar al otro y a nosotros mismos en ese subidón. Mercurio casi en Escorpio, la mente casi entrando en el pantano de la muerte y la resurrección lo mira a Urano, en Tauro el del cuerpo, la sensación y casi que se pelean por cranear la revolución. Pero es un buen momento para ser compasivos y tratarnos con amor. Paciencia para con nosotros más que con que el prójimo, estamos dando muerte a ese yo que se creyó el cuento de Heidi, los Ingals y el príncipe en el Caballo y que papá es el gran salvador. Muerte, funeral, despedida de una vieja vos. Es triste dejarte ir, a esa muletilla, a ese berrinche, a ese flor de quilombo que tan bien te venía en cada situación. Muerte a lo que creías cierto, muerte a tu personalidad engreída, tímida, a la personalidad que alguna vez creímos que podía ser definida. Muerte al padre y a la madre como dueños de la verdad, muerte a nosotros mismos como únicos existentes en esta realidad. Muerte a las vidas pasadas que traemos, con las que cargamos y de las que creemos a veces que tenemos que redimir y reivindicar. Muerte a la profesión que asumo hoy empiezo a olvidar. Muerte a las religiones, a las visiones a una vida que ya no existe más. Y si vamos a evolucionar la palabra muerte te tendría que empezar a gustar, dos caras de la misma moneda y a revolver la mierda sin chistar. Lloremos todo, limpiemos todo, sabemos que los cocodrilos no nos comen, que el monstruo debajo de la cama no esta más. Creo que a esta altura, podemos más de uno decir que lo hemos llegado a comprobar.
¿A qué vas a morir?, ¿qué vas a sembrar? Entregate, no resistas y empezá a sentir el placer de trasmutar.